Dos años después del asesinato del fiscal Marcelo Pecci en una playa privada de la isla Barú, en Cartagena, nueve personas fueron capturadas y siete condenadas, mientras que el autor intelectual aún no ha sido identificado. La investigación ha llamado la atención de la Fiscalía de Estados Unidos y la DEA, quienes buscan determinar si los 2 mil millones de pesos pagados por el crimen pasaron por el sistema financiero estadounidense.
Una comitiva de agentes de la Fiscalía y de la DEA llegó a Colombia para entrevistar a los principales implicados en el homicidio, pero no obtuvieron la información deseada. Los hermanos Ramón y Andrés Pérez Hoyos, condenados por el crimen, se comprometieron a colaborar con las autoridades para revelar el complot y los autores intelectuales del asesinato.
Los hermanos Pérez Hoyos, con un pasado criminal en grupos armados, fueron los autores intelectuales del asesinato de Marcelo Pecci. La Fiscalía colombiana continúa explorando líneas investigativas y espera obtener información de los hermanos sobre quién dio la orden de matar al fiscal.
Francisco Luis Correa Galeano, considerado el cerebro del asesinato, ha recibido el principio de oportunidad con inmunidad parcial por colaborar con la justicia. Se espera que su testimonio sea clave para esclarecer el caso.
La familia de Pecci sigue clamando por justicia y pide que se dediquen todos los recursos necesarios para identificar al autor moral del crimen. Siete personas han sido condenadas por su participación en el asesinato, entre ellos los hermanos Pérez Hoyos y Margareth Chacón.
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