La decisión de las autoridades judiciales de liberar a Francisco Javier Blanco Ortiz ha generado indignación y repudio en varios sectores de Cartagena. Este individuo, presuntamente involucrado en un ataque violento contra tres mujeres en la madrugada del 25 de mayo en el barrio San Antonio, había sido señalado por intentar atracarlas.
A pesar de la gravedad de la agresión y de las denuncias de lesiones personales presentadas por las víctimas, un juez de control de garantías decidió otorgarle la libertad a Blanco Ortiz, quien enfrentaba cargos por dicho delito.
En respuesta, el alcalde Dumek Turbay instruyó al secretario del Interior, Bruno Hernández, para que presentara una denuncia por tentativa de homicidio contra el presunto agresor, quien resultó con múltiples lesiones en el rostro y el cuerpo tras ser defendido por las mujeres.
La denuncia, radicada el mismo domingo (25 de mayo) por la tarde y posteriormente reiterada por Hernández en la Fiscalía, ha llevado al Distrito a expresar su rechazo frente a la decisión judicial, que permite que el acusado camine libremente por las calles de Cartagena. Esto genera preocupación por el riesgo de que pueda perpetrar nuevos ataques o incluso un eventual feminicidio.
En el informe de los policías que atendieron el incidente, se especifica que “la comunidad se percató de lo que ocurría y acudió a auxiliar a las tres mujeres, quienes estaban siendo víctimas de agresiones físicas”.
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