El análisis de más de 14,5 millones de cuentas médicas, con un valor total que supera los $15 billones de pesos, ha comenzado gracias a las tres firmas contratadas por la entidad de salud, con el fin de depurar la facturación de la empresa promotora de salud.

Este proceso será llevado a cabo por American KPO, ACS Aciel Colombia Soluciones Integrales S.A.S. y Sosalud S.A.S., y tiene como objetivo establecer un manejo financiero y contable más claro dentro de la Nueva EPS, tras los hallazgos iniciales detectados por organismos como la Contraloría General.

Gloria Libia Polanía Aguillón, agente especial interventora de Nueva EPS, indicó que las compañías iniciaron la operación de auditoría el 10 de noviembre, lo que permitirá reconstruir la trazabilidad de la facturación y verificar el respaldo de cada cuenta médica, así como depurar la información contable.

La agente especial subrayó que esta depuración marcará un hito en la gestión de Nueva EPS. Lo que antes estaba opaco y descontrolado ahora será revisado con transparencia, rigor técnico y respaldo institucional. “Este proceso responde al mandato de recuperar la entidad y garantizar un manejo transparente de los recursos de salud”, afirmó.

Polanía precisó que las cuentas bajo revisión no habían sido sometidas a auditorías formales, y con esta depuración, se busca sanear la contabilidad de Nueva EPS, revelar su verdadera situación financiera y fortalecer la atención a sus más de 11,7 millones de afiliados en el país.

Entre los principales impactos esperados se destacan:

– Estabilización de los procesos de radicación de facturas.
– Procesamiento y registro transparente de la facturación pendiente.
– Determinación del estado real de la cartera con los prestadores.
– Gestión eficiente y controlada de los recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud.

Este proceso se complementa con una auditoría forense integral, ya en marcha, que ha sido contratada para examinar el período de 2019 a 2024 y el primer semestre de 2025, con el propósito de identificar posibles irregularidades en contratación, facturación, pagos, sistemas de información e ingresos.