Los pacientes en Colombia enfrentan dificultades para obtener los medicamentos recetados por los médicos en las EPS, ya que se reporta una escasez generalizada de medicamentos en los dispensarios. Esta situación ha llevado a que los pacientes deban costear los medicamentos con su propio presupuesto, ya que las EPS no están cumpliendo con la entrega de los mismos.
Ante esta problemática, se solicita la intervención de las autoridades competentes, como la Superintendencia Nacional de Salud y el Gobierno Nacional, para abordar esta situación de vida o muerte. Incluso se menciona que la escasez de medicamentos ha llegado al punto de que ni siquiera se consiguen pañales en los dispensarios de las EPS en Colombia.
La insatisfacción entre los usuarios es generalizada, con amenazas de nuevas tomas en las instalaciones de la Nueva EPS en Cartagena. Se denuncia que las fórmulas médicas presentan numerosos pendientes, lo cual se agrava por la falta de medicamentos y la ausencia de contratación de especialistas en las EPS como Coosalud, Mutual Ser y Sanitas.
Los pacientes afectados mencionan que las EPS podrían estar generando una crisis artificial en oposición al gobierno nacional. Se critica que los representantes de las EPS estarían desviando los recursos de la salud hacia actividades distintas a la atención médica, e incluso se sugiere que podrían estar cobrando por pacientes fallecidos.
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