Una familia en el sector Los Jureles de San Francisco está sumida en el dolor y la tristeza tras perder a su pequeño tesoro, Johnatan Barrios Ramos, un niño de tan solo un año y un mes de edad.
El jueves 7 de septiembre, un inesperado suceso dejó a la familia conmocionada y preguntándose sobre el futuro que había imaginado para el pequeño. Esa tarde, cuando Johnatan acababa de almorzar, el calor del día llevó a su madre a tomar la decisión de ponerlo en una ponchera con agua para refrescarlo. Junto a él, se encontraban otro niño de un año y tres meses y una niña de 4 años que jugaba con una manguera.
Según un relato de una pariente, las adultas de la familia estaban cerca de los niños, supervisando su juego en el patio. Sin embargo, en un instante, la niña llamó a la madre y le informó que Johnatan estaba boca abajo en el agua.
Cuando las mujeres se acercaron, encontraron al niño inconsciente frente a los otros niños que no comprendían lo que estaba sucediendo. Rápidamente, lo llevaron en una moto hasta el CAP de La Esperanza, pero lamentablemente, Johnatan llegó sin vida.
La familia está devastada por la pérdida y en estado de shock. La doctora que atendió al niño en el CAP informó que Johnatan se había atragantado con la comida, ya que no la había digerido adecuadamente, y que su intento de refrescarse en la ponchera resultó en un trágico accidente. La ponchera, que en realidad tenía poca agua, no pudo evitar la tragedia.
Mientras la madre y la abuela de Johnatan están abrumadas por el dolor y no pueden contener las lágrimas, el resto de la familia espera poder reclamar el cuerpo en Medicina Legal. La comunidad entera se une en duelo por la partida prematura de este pequeño que, aunque apenas comenzaba su vida, ya había llenado de amor y alegría a todos los que lo conocieron.
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