El martes 9 de abril, Gloria Guerrero recibió la devastadora noticia de que sus dos hijas, Laura Camila de 21 años y Ángela Lorena Gómez Guerrero de 13, habían sido encontradas sin vida en una finca en zona rural del municipio de Guamo en Tolima. El lunes 8, las hermanas le habían enviado un mensaje a su madre diciendo que estaban siendo secuestradas y tenían miedo.
Los cuerpos de las jóvenes fueron encontrados en la residencia donde se practicaban rituales relacionados con la brujería, el esoterismo y el satanismo. Se encontraron altares y elementos vinculados a la magia negra en el lugar. Las autoridades confirmaron que las hermanas fueron asesinadas a tiros en la cabeza y presentaban signos de tortura.
Las investigaciones apuntan a un hombre conocido como ‘el Zarco’ como el principal sospechoso del doble crimen. A pesar de esto, la madre de las víctimas declaró en una entrevista que no conoce a nadie con ese alias y exige que se haga justicia por sus hijas. Los cuerpos de Laura Camila y Ángela Lorena reposan en la morgue de Medicina Legal de Ibagué mientras su familia busca ayuda económica para realizar el funeral.
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