La Procuraduría General formuló cargos disciplinarios a Cristian Fernando Cañón Bernal, exsubdirector de Planeación de Cardique durante los años 2019 al 2023, por entorpecer y obstruir las funciones de un subalterno. Se investiga si Cañón Bernal intentó aislar laboralmente a un profesional universitario del área de Sistemas, impidiéndole acceder a la información necesaria para cumplir con sus tareas asignadas. Según la denuncia, entre los años 2020 y 2023, el exsubdirector limitó al subalterno a realizar tareas técnicas en lugar de las de coordinación y actualización de software, entre otras. Se señala que Cañón Bernal no cumplió con compromisos establecidos en la Oficina de Control Interno Disciplinario y desconoció los asuntos tratados en Comités de Convivencia Laboral. La Procuraduría argumenta que tenía la responsabilidad de evitar inequidades laborales y garantizar el cumplimiento de acuerdos para corregir las supuestas irregularidades cometidas. Se califica la posible falta como gravísima de dolo, y se permite a los involucrados presentar descargos y aportar pruebas para su defensa.
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