En la reciente Audiencia Pública, se aprobó el Plan de Vida Digna, marcando un avance significativo para las comunidades del corregimiento de Micoahumado, en Morales, sur de Bolívar, en su proyecto de establecer el Territorio Campesino Agroalimentario-TECAM “Paz y Soberanía de la Serranía de San Lucas”.

Este proyecto abarca 32,000 hectáreas en 13 veredas de los municipios de Morales y Arenal, donde residen aproximadamente 850 familias campesinas dedicadas a la producción de cacao, café y caña panelera, así como a la ganadería a pequeña escala y al cultivo de pancoger.

“Este proceso surge a raíz del conflicto armado que ha afectado nuestra región, donde la identidad se basa en la producción campesina y la preservación del medio ambiente”, comentó Liliana Reyes, miembro del Comité TECAM.

Juan Harman Ortiz, director de la Agencia Nacional de Tierras, destacó que este esfuerzo ha logrado unir a los campesinos en torno a la transformación de un territorio que ha sufrido por el conflicto, convirtiéndolo en una región productiva y en paz. “Los campesinos son parte integral del ecosistema, y es fundamental reafirmar su legítimo derecho a permanecer, producir y soñar con un futuro más próspero para sus hijos”, añadió Ortiz.

El director también mencionó que este tipo de iniciativas organizativas son cruciales para la sostenibilidad de la Reforma Agraria.

Dentro del marco del TECAM, se ha delineado el Plan de Vida Digna, que establece las prioridades del territorio a través de diez ejes estratégicos: soberanía alimentaria, educación, salud, infraestructura, comunicación popular, cuidado ambiental, justicia y paz territorial, equidad de género, economía campesina y participación política.

Asimismo, el plan incluye 42 proyectos comunitarios, como la creación de una escuela campesina dedicada a la soberanía alimentaria, la formación de un fondo solidario para la economía popular, y la construcción de infraestructuras viales y de riego que beneficiarán a las veredas del territorio.