Si bien es cierto Cartagena es una muy buena plaza para el negocio inmobiliario, este estuvo en auge y el crecimiento era evidente para el 2018, pero pasaron cosas que no debieron suceder tanto a nivel local como a nivel nacional, el edificio Blas de Lezo II, construido en el sector Plan 400 del popular barrio Blas de Lezo en Cartagena fue la bomba que detonó y despertó a las autoridades nacionales, ¡si las autoridades nacionales! porque las autoridades locales son cómplices del mismo sistema politiquero que ha dominado a Cartagena durante décadas, los curadores, la secretaria de planeación, los inspectores de policía, la oficina de control urbano y los alcaldes de las localidades encargados de vigilar el cumplimiento de las licencias se han hecho los de la vista gorda ante tantas irregularidades de la construcción en Cartagena.
Persiguen a las victimas y no a los victimarios.
Las autoridades locales persiguen a las victimas y no a los victimarios, imagínese las familias que han ahorrado toda la vida para comprar su vivienda propia, las deudas con las entidades bancarias, los tramites, sus sueños, el tiempo, para que de un día a otro vengan las autoridades, las mismas que permitieron este desastre de desarrollo urbano y cómplice de las mafias constructoras que han levantado edificios, sin estudio de suelo, sin análisis estructural, sin planos arquitectónicos. Es una injusticia y un subsidio por 6 meses no va a arreglar la situación, todo esto lo causa la ingobernabilidad.
Nos hemos arrodillado ante ellos.
¡La culpa es nuestra ciudadanos Cartageneros! por votar tan mal durante años, los politiqueros han hecho con nosotros lo que se les viene en gana, todo tiene que ser con palancas y padrinos políticos para conseguir un trabajo, la compra de votos es evidente en los barrios más humildes de Cartagena y en los barrios que tienen un ingreso promedio, este es el día a día de los Cartageneros y esto trae consecuencias desfavorables para la ciudad, nos hemos arrodillado ante ellos, los pocos líderes que existen también se corrompen, la decadencia de esta ciudad es evidente no se sabe para donde va, no existe actualmente un capitán que dirija este barco, el actual alcalde que ha sido enviado por el presidente Juan Manuel Santos no es más que uno de los mismos con las mismas, es evidente, en los meses que ha estado solo decreta contra la gente más humilde.
Para tener en cuenta.
En esta época electoral estudie muy bien su candidato, investigue su pasado, sus amigos, quien financia su campaña, investigue todo porque es nuestra responsabilidad como ciudadanos, recuerde que en nuestra ciudad Cartagena los casos de corrupción son abundantes y han sido por los mismos con las mismas, ellos han cambiado su sonrisa, su perfil, sus supuestas ganas por cambiar la ciudad y hacerla prospera, pero la realidad es otra, se lo han robado todo, pareciera que se llevaran el futuro y nosotros hemos sido cómplice de esta situación, eso lo tenemos que aceptar es el primer paso para crear una indignación local y nacional.